Aún necesito encontrar un equilibrio especial que me lleve a más, porque ando necesitado. Y en un momento eras tú la sencilla virtud que faltaba justo a mi lado. Es lo que tu me das, es lo que yo te he dado. Y aunque lo puedo esconder, necesito hacerlo. Si quieres vuelvo cuando tengas un minuto para mi. Como si fuera verdad que te puedo olvidar en momentos determinados. Intento ser esa luz que se quede en ti, aunque tu no me hayas llamado. Para instalarme después donde quiera que estés, sin siquiera haberme alejado.
Y aunque lo quiera esconder, ya no puedo hacerlo. Si quieres vamos cuando tengas un minuto para mi. Intento que suene bien sin que te parezca que insisto. Directo a un final en que lo mejor de nosotros se quede aquí mismo. Ya no llegan mis palabras a entregarse en cada canción. Son puro invierno, sin color, sin estrellas y sin nada ni nadie alrededor.
Me pregunto otra vez por qué quieres saber si no estamos equivocados. Es tan difícil creer que algo sea así, porque estamos rodeados. Tal vez no te suene bien, tal vez te parezca que insisto. Yo intento que suene bien, sin que te parezca que insisto.
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